Cómo funciona el reciclado de coches en un desguace
¿Sabías que actualmente más del 90% de los vehículos son reciclables? Para contabilizar esto, nos basamos, además, en la reutilización de componentes y piezas de repuestos. Así, el reciclaje de un vehículo en desguace consigue que el impacto medioambiental que genera sea mínimo.
Pero si estás pensado en la alta contaminación de una sola batería de coche o en la de los líquidos y aceites que contiene un vehículo, debes saber que incluso ellos cuentan con su propio proceso de reciclaje, de forma que la preservación del medioambiente no se vea afectada, por ello se trabaja en los desguaces junto a plantas de reciclado.
Vamos a ver cómo funciona el reciclaje de coches en un desguace:
Cómo se recicla un coche en un desguace
Los coches que denominamos VFU (Vehículos Fuera de Uso), esos que dejan de circular, se convierten en un residuo peligroso si se abandonan y no son descontaminados y reciclados de forma correcta por un Centro de Tratamiento Autorizado o Desguace.
1. Comprobación del vehículo
Cuando un vehículo fuera de uso entra en las instalaciones de un desguace, se comprueba de forma exhaustiva y se revisa el número de bastidor. El número de bastidor permitirá a los operarios comprobar toda la información sobre el coche: fecha y lugar de fabricación, tipo de motor empleado… pero va más allá, pues también permitirá descubrir si ha sido modificado, si ha habido operaciones de compraventa, qué reparaciones han sido efectuadas en qué taller… Tras la comprobación de que todo está en orden, se procede a la tramitación de baja definitiva en Tráfico y dan comienzo los procesos de descontaminación y despiece.
2. Extracción de materiales peligrosos
Aquí entra en juego la mano de profesionales especializados en el tratamiento de estos productos. La descontaminación implica al líquido anticongelante, el carburante, los aceites… que en desuso pueden convertirse en elementos potencialmente peligrosos para el medioambiente y para la salud de la población. Una vez extraídos y clasificados, se almacenarán en contenedores especiales dispuestos para ello a la espera de ser recogidos por una empresa de gestión de residuos especializada.
3. Despiece y prueba de calidad
Cuando el vehículo ha sido descontaminado, se procede al despiece del mismo, a la examinación de las piezas y a su clasificación. Las piezas pasarán por una meticulosa prueba de calidad para poder ser puestas a la venta como recambios de segunda mano.
4. Retirada de materiales para la destrucción del vehículo
Aquellos materiales que pudieran entorpecer la destrucción del vehículo como plásticos, vidrios, aceros… podrán ser separados del vehículo para su posterior reciclaje o, en caso de no poder ser reutilizados o reciclados, pasarán a plantas de fundición. Algunos vehículos que ya han sido descontaminados pueden guardarse en campa, una especie de segundo almacén en el que los vehículos permanecen por un período de tiempo como alternativa para la búsqueda de piezas pequeñas o que no son separadas del vehículo en el momento del despiece.
5. Fragmentación y prensado
Los coches que no se hayan almacenado en campa pasan a la fragmentadora. Aquí, los componentes metálicos serán extraídos por grandes imanes que los separarán de los elementos no férreos. En la segunda fase de la fragmentación, mediante otras técnicas de cribado, se liberarán otros materiales que podrán ser también clasificados para su posterior reciclaje.
Cuando ya solamente sea un esqueleto de metal, el vehículo pasará a la prensadora. Esta máquina convertirá lo que queda de coche en un cubo de metal de, aproximadamente, un metro cúbico. Estos cubos serán, posteriormente, enviados a plantas de fundición.
En qué se convierte un coche reciclado
Seguro que llegados a este punto ya estás preguntándote dónde va a parar todo aquello que se ha despiezado y reciclado de un coche. Pues bien, todos esos aceros, metales, cartones, cauchos, plásticos, elementos textiles… pueden convertirse en materiales que ni te imaginarías que pudieran estar fabricados a partir de un coche:
La chatarra del coche
Cuando se le quitan las impurezas y se funden los restos, un vehículo puede tener una segunda vida como carro de la compra, lavadora, piezas de otro coche…
Las ruedas
A causa de su alta contaminación, deben tratarse con cautela; así pues, debidamente triturados, los neumáticos pueden tener una segunda vida como aislantes, carreteras, suelos de seguridad en parques infantiles…
Líquidos y plásticos
Esos líquidos que han sido separados por especialistas se llevan a ser analizados para ser tratados y depurados. Aquellos que se encuentran en buenas condiciones son aprovechados de para la creación de nuevos combustibles o aceites lubricantes de motor, por ejemplo. Los que no, son incinerados.
El ahorro de materias primas que supone el reciclaje íntegro de los vehículos en los desguaces es imperante para la disminución del consumo de nuevos recursos. Darlos de baja definitiva y depositarlos en los desguaces es formar parte de la preservación del medioambiente. En Desguace Naldo te ayudamos con el trámite de la baja definitiva de tu vehículo.¡Pregúntanos!