La barra transversal es parte de la suspensión. Se supone a los esfuerzos laterales que se producen en las curvas, al frenar y al cambiar de dirección. Como un eslabón entre la rueda y la carrocería, la barra transversal juega un papel importante para la seguridad, por lo que está confeccionado de acero forjado. En el lado externo se encuentran unas juntas, que ofrecen una conexión flexible. Normalmente, en la parte de la carrocería se utilizan los así llamados Silent- Blocks, o en otras palabras las juntas de caucho-metal, sino en la parte de la rueda hay una junta de rótula simple. En la fabricación de las juntas de caucho-metal se utiliza el elastómero.

Este material moderno, a pesar de tener muchas ventajas, con el tiempo se desgasta. A menudo, el motivo de cambiar el brazo transversal de suspensión es el desgaste de las piezas de goma. Rara vez falla debido a la corrosión de las piezas de acero. En cualquier caso es necesario hacer el reemplazo, tan como la barra transversal de suspensión puede llevar a graves consecuencias. Si el coche llegará a ser incontrolable, en muchos casos será difícil de evitar el accidente. Así que no se demore la reparación bajo ninguna circunstancia.

Hacer el reemplazo del brazo transversal no presenta ninguna dificultad. Sin embargo, este trabajo debe hacerse con cuidado. Habitualmente se utilizan los auto-pernos. Ellos también tienen que ser reemplazados durante la reparación. Lo mismo se puede decir y sobre los que tienen grapas de protección. Nuestro catálogo online incluye un gran número de piezas de repuesto, que le permitirá reducir los gastos sin perjudicar a la calidad. Disponemos de tales repuestos para su automóvil como, las zapatas de freno, los cubos, los cojinetes, los cilindros de freno, las bujías de encendido, los distribuidores de encendido, las luces traseras, los faros delanteros, y muchos más.

Cómo identificar fallos en el brazo de suspensión

Para realizar el diagnóstico de este componente, utilizamos un gato o elevador hidráulico. En primer lugar, quitamos las rótulas, a continuación nos aseguramos de que el brazo de suspensión no se deja caer. Esto puede ser comprobado por balanceo vertical. En condiciones normales, el brazo debe actuar como un resorte, volviendo a su posición inicial. También debemos observar el buje de goma, no debe girar en relación a los ojales.

Podemos saber cuando un brazo de suspensión independiente necesita de revisión por los siguientes síntomas:

• huecos en los cubos de las ruedas;
• neumáticos desgastados;
• vibración de la carrocería del coche o del volante cuando se conduce;
• ruido extraño en los giros y cuando se conduce sobre carreteras de poca calidad;
• potencia del motor reducida;
• aumento de la libre circulación del volante.

Razones de los fallos de funcionamiento del brazo de suspensión independiente

El fallo más frecuente del componente está causado por su deformación. La principal razón por la que se produce la deformación es la conducción sobre baches a alta velocidad. También, la mala calidad de los componentes, que se hayan utilizado más allá de su vida útil y que lleva a una avería rápida.

Durante el funcionamiento de vehículo, se produce un desgaste natural del buje de goma y de las rótulas de la suspensión, lo que acaba resultando en la pérdida de su forma o en la destrucción completa del brazo. Para evitar estos fallos, no debemos dejar de diagnosticar el acoplamiento de los componentes de la suspensión pasados los 50.000 km recorridos.

Las horquillas de la suspensión pueden estar hechos de acero o de una aleación ligera. Los componentes de acero son más propensos a sufrir corrosión debido a la entrada de agua durante la conducción. Para que el mecanismo de suspensión dure más, debemos elegir brazos de aleación ligeros.

Sustitución de un brazo de suspensión independiente

Para sustituir el brazo por uno mismo, siga las recomendaciones que se detallan a continuación:

• instalamos los soportes bajo el vehículo, después de levantarlo con un gato;
• quitamos la tuerca de sujeción;
• desconectamos el brazo de la carrocería del coche;
• desconectamos también el brazo de dirección de la rótula del brazo;
• quitamos el componente e instalamos uno nuevo entre la rótula esférica y el brazo;
• utilizaremos tuercas y tornillos nuevos para sujetar la pieza nueva;
• apretamos las tuercas situadas debajo con un par de apriete de 90 Nm, a continuación, las giramos otra vez entre 30° y 40°;
• en la parte trasera, sujetamos el perno del brazo a la carrocería apretando la tuerca (pero no completamente);
• con un gato, levantamos el brazo de manera que quede horizontal a 80°;
• apretamos la tuerca con un par de apriete de 60 Nm ;
• bajamos el coche y quitamos el gato.