Cómo saber si hay un fallo en el fuelle guardapolvo de la junta CV

Para identificar un fallo en el componente, tiene que inspeccionarlo. En la superficie del fuelle guardapolvo no debería haber grietas, roturas, o restos de aceite. A menudo resulta bastante difícil detectar las microfisuras de la pieza. Por eso, la inspección es más eficiente cuando se eleva la parte delantera del coche con un gato y gira el volante tanto como pueda: los daños son más visibles en la goma estirada. Dado que la vida útil de la junta CV depende directamente del estado de estas piezas, se aconseja comprobarlas al menos una vez al mes.

Puede identificar que el fuelle guardapolvo de la junta CV necesita un diagnóstico por los siguientes síntomas:

• durante la conducción surgen sonidos inusuales en la parte de la suspensión delantera, que aumentan o desaparecen al tomar curvas.
• el vehículo da tirones o sacudidas al acelerar.

Qué puede causar un fallo en el fuelle guardapolvo de la junta CV

El fuelle guardapolvo de la junta CV está expuesto de forma continua a la suciedad y la humedad, a componentes químicos de deshielo y otros factores agresivos. Por esta razón, los componentes de mala calidad no solo se desgastan mucho más rápido, también provocan un fallo prematuro de la propia junta CV propiamente dicha.

La destrucción del fuelle guardapolvo a menudo se debe al uso de una grasa inadecuada o a la falta de la misma. Algunos lubricantes pueden incluir ingredientes que destruyen la goma o caucho. Si el lubricante es insuficiente, los componentes de la junta CV ven como el desgaste abrasivo aumenta, lo que viene acompañado de una mayor generación de calor. Los fuelles guardapolvo de las juntas CV interiores se sitúan cerca del motor, por eso están expuestos al impacto de temperaturas más altas y puede que la superficie termine derritiéndose; mientras que los fuelles de las juntas CV exteriores son más susceptibles de sufrir daños mecánicos, en concreto, perforaciones al golpear un objeto afilado. Pero también se pueden derretir si, por ejemplo, el cubo o buje se sobrecalienta debido al desgaste del cojinete.

Cambio de un fuelle guardapolvo de la junta CV

Estos componentes son consumibles, así que cuando fallan, han de ser reemplazados. Puede instalar las nuevas piezas usted mismo, pero esto requiere de un set de herramientas especiales. Es recomendable cambiar los fuelles guardapolvo en las juntas CV interiores y exteriores al mismo tiempo, por lo que es mejor comprar un kit de fuelles guardapolvo para el eje de transmisión. Los trabajos de reparación se hacen más cómodamente en un foso o rampa. Para cambiar los fuelles guardapolvos de la junta CV, proceda del siguiente modo:

1. Ponga el freno de mano.
2. Use una llave estriada acodada para desatornillar la tuerca del cubo.
3. Con una llave de diámetro apropiado, desatornille las fijaciones del casquillo estabilizador.
4. Retire la rueda tras desatornillar los pernos.
5. Desconecte el extremo de la barra estabilizadora. Para ello necesitará una herramienta de extracción.
6. Desmonte la brida de la junta CV interior.
7. Retire las fijaciones de la rótula.
8. Mueva con cuidado el puntal hacia afuera y desmonte el eje de transmisión junto con las juntas CV, tirando cuidadosamente hacia usted.
9. Retire los anillos de retención ubicados en el exterior del fuelle guardapolvo.
10. Sujete el eje de transmisión en un tornillo de banco y desmonte la junta CV con la ayuda de una herramienta de extracción. Si no tiene el equipo adecuado, puede usar las herramientas que tenga disponibles, pero solo debería trabajar en la jaula interior del componente.
11. Limpie la junta CV de lubricante, suciedad y óxido, y vuelva a montarla.
12. Ponga un nuevo fuelle guardapolvo en el eje de transmisión, asegúrelo con una abrazadera.
13. Rellene el fuelle guardapolvo con la cantidad necesaria de grasa y vuelva a instalar la junta CV en su sitio.
14. Complete el montaje realizando el procedimiento indicado en orden inverso.